miércoles, 25 de noviembre de 2009

El Perro del Mar - Love Is Not Pop

El Perro del Mar, nuestro invitado de hoy, es el castellano nombre con el que firma sus discos la sueca Sarah Assbring. Hace tiempo que teníamos ganas de hablaros de este fascinante proyecto musical. Os contamos su historia...

Dicen que encontró su inspiración en las islas Canarias, donde estaba descansando unos días. Sarah se encontraba meditando, tumbada en la playa, escuchando el musical sonido de las olas, esperando quizá que las ideas afloraran en su mente, cuando apareció un perro que paseaba solitario junto a la orilla del mar y que se le acercaba. Reparó que sus huellas eran borradas por el mar, como si quisiera ocultar su procedencia.

Tuvo la sensación de que el perro había aparecido de súbito, pues no había reparado en que figura alguna estuviera acercándose. Se sintió atraída, se acercó a él y le acarició, parecía perdido y su mirada era triste; dicen que el perro le susurró un mágico secreto al oído y una extraña sensación invadió su espíritu. Continuó mirando al mar hasta que anocheció.

Se levantó y se fue al viejo estudio que había alquilado y que había abandonado hacía unas horas, aburrida, sin ideas, sin apenas fuerzas, para dar un paseo por aquellas paradisíacas playas en busca de alguna inspiración.

Cogió su guitarra y se puso a componer, las ideas ahora fluían y así empezó a surgir un trabajo maravilloso, cual fue aquel disco homónimo de debut del Perro del Mar (2006).

Dicen que cada tarde se paseaba por la playa y allí se aparecía de nuevo ese perro. A ella le gustaba pasear junto a él, libremente, uno al lado del otro. Su compañía le hacía sentir bien. En ocasiones, ella se paraba, le acariciaba, se acercaba a su cabeza y parecía como si el perro algo le susurrara...

Dicen que, desde entonces, aún puede verse al atardecer a un perro solitario en esa playa, andando, jugando, correteando por la arena… Pero, a medida que tratas de acercarte a él, su figura se desvanece.

En 2008 editó su segundo trabajo From The Valley To The Stars y este trabajo nos decepcionó un poco. Las canciones estaban bien construidas y en la línea de las anteriores, pero no era lo mismo: les faltaba la magia de aquellas...

En el capítulo de sensaciones subjetivas que nos transmite la música de El Perro del Mar podemos hablar de elicadez. sensibilidad, frescura evocadora, espontaneidad y de esa pequeña sensación de insatisfacción finalmente colmada, esa ingenua morbidez, esa ternura incauta.

Y ahora, Sarah Assbring, parece haber reencontrado a su perro. Dicen que ha vuelto al lugar de aquel encuentro, a aquella playa. Y cuentan que, una tarde, cuando ya se ponía el sol, comenzó a ver en lontananza su difuminada figura que, mientras se aproximaba a ella, se iba lentamente formando.

Era el perro... Si, si, lo era, y estaba allí junto a ella. Sarah alargó la mano para tocarle y pudo notar la humedad del mar en su tupido pelaje. Lo abrazó, lo estrechó contra sí y, de nuevo, una fuerte sensación invadió su mente; cerró los ojos, una lágrima escapó con violencia para después derramarse lentamente por su mejilla, muy despacio, como jugando a hacer un dibujo…

Cuando abrió los ojos, el perro ya no estaba… Se enjugó los ojos, los cerró de nuevo y los volvió a abrir: no había nada. Miró por todas partes, pero en aquella solitaria playa sólo estaban ella, las dunas que se entrelazaban en la arena y el mar, colmado de espumosas crestas que se deshacían inexorablemente contra la orilla: una tras otra, otra tras una, sin aparente inicio ni fin…

Un poco asustada, pero interiormente llena de vida, empezó a caminar cada vez más rápido, hundiendo sus pies en la arena, pero sus pasos parecían pesar más que nunca. Su cuerpo pesaba, pero su mente volaba.

Era noche cerrada ya cuando estaba de regreso en su estudio. De nuevo aquel viejo estudio donde se pergeñó su primer disco. Su mente estaba llena, su corazón radiante, su espíritu parecía querer salir de su envoltura… poco a poco fueron emanando las notas de Love Is Not Pop (2009), un mini-disco de tan sólo 7 canciones que es, hasta la fecha, su último trabajo.

El Perro del Mar ha vuelto y se ha reencarnado de nuevo para todos nosotros. Disfrutadlo.




http://www.elperrodelmar.com/
http://www.myspace.com/elperrodelmar


miércoles, 18 de noviembre de 2009

At Swim Two Birds - Before You Left

Os descubrimos a otro de los grandes discos de este año. Se llama Before You Left y está firmado con el nombre de At Swim Two Birds, como el título de la primera novela de Brian 0’Nolan (1939), dato que por supuesto desconocíamos totalmente, no vayamos a hacernos aquí los eruditos… Pero para eso tenemos las poderosas armas que la red nos ofrece y que, sin ellas, ya nada sería igual; de tal guisa, que ya casi no recordamos cómo nos podíamos apañar cuando –no hace demasiado tiempo- no disponíamos de ellas…

Dejemos las filosofías y modos de la vida actual y vayamos con nuestro invitado de hoy. At Swin Two Birds es el nombre con el que firma sus proyectos en solitario Roger Quigley, cantante del excelente dúo de Manchester The Montgolfier Brothers, el que forma con Mark Tranmer. Algún día os los presentaremos por aquí porque tienen verdaderas joyas musicales que todo aficionado al buen pop debería conocer.

No vamos a extendernos aquí con aburridos datos biográficos sobre Roger Quigley, nuestro personaje de hoy. Tenemos a nuestra disposición la red –de nuevo la red- si queremos indagarlos. Pero os podemos recomendar tanto los tres discos que The Montgolfier Brothers llevan editados, como los dos anteriores trabajos de At Swim Two Birds, a saber: Quigley’s Point (2003) y Returning to the Scene of the Crime... (2007). Y ahora, vamos con lo que más nos toca dentro y con lo que nos despierta sensaciones: su música.

Before You Left (2009), como todos los trabajos anteriormente mencionados, es un disco para escucharlo despacio y con tranquilidad. Nada de atropellados viajes con ruido en el metro o por la calle, nada de carreras apresuradas marcadas por las prisas que se exigen en los apretados guiones que escribe la sociedad actual; no, al menos, hasta que lo hayamos interiorizado.

At Swim Two Birds impresiona por la tranquilidad de su música, que en general es de tempo lento, pero que nos arrastra inexorablemente al abismo sentimental que emana de ella. Before You Left no aburre, como pudiera parecer en un principio, si nos logramos meter dentro del mismo. Va creciendo con las repetidas escuchas, a medida que vamos asimilando la riqueza de sus detalles y la de sus textos.

La música, el sonido y el ambiente que consiguen es tremendamente personal. Pura poesía escondida bajo el otoñal paraguas que nos protege del viento y de la lluvia, meteoros que incluso se dejan escuchar literalmente en el disco, como interludio o transición entre algunas canciones. Nos relaja y nos encanta… quizá también influidos por nuestra avidez de otoño, que en nuestros tiempos parece haber desaparecido.

Las composiciones están muy trabajadas y muy bien instrumentadas, con sabor a vinilo, creando unas perfectas atmósferas que acuden en el preciso instante para envolver a esas guitarras ondulantes, entrelazadas y, por encima de todo ello, surge una susurrante, desnuda y preciosa voz masculina que nos arropa y nos narra un cuento en la noche.

No perdamos la ocasión de sosegar, de tranquilizar por un momento nuestra agitada vida cotidiana; desconectar unos minutos, relajarnos, dejarnos llevar y degustar la suave miel que nos ofrece esta música.

viernes, 6 de noviembre de 2009

Piano Magic - Ovations

Doce años llevan Piano Magic evolucionando bajo la hegemonía de Glen Johnson, con diferentes formaciones, estilos y propuestas, pero siempre marcados por el signo de la solidez y de la calidad.

Se trata de una apuesta musical que siempre está ahí, que permanece y que muy frecuentemente está obsequiándonos con nuevos trabajos. No se trata de ese tipo de bandas que hace un buen álbum, desaparece y después resulta que la crítica trata de mítico su trabajo, musa, fuente y origen de un montón de influencias posteriores. Tampoco es ese otro tipo de banda que hace un par de discos notables seguidos de un montón de discos más mediocres, pero que igualmente triunfan, un poco por la inercia de sus primeros trabajos, un poco viviendo de las rentas anteriores. Ni tampoco es, en fin, una banda de las que aparecen al calor de fugaces y repentinas modas, de agresivos booms agitados por el mejor marketing, que parecieran comerse el mundo, ser los nuevos Beatles o similares y que, sin que nadie sepa bien la razón, desaparecen tan rápido como vinieron y ya nadie se acuerda de ellos.

Piano Magic siempre está ahí y siempre tiene un buen disco que ofrecernos. Puede estar más o menos inspirado, o puede estar más o menos acorde con nuestra concepción musical –que ellos mismos a menudo también varían- pero ellos siempre están ahí con un trabajo de calidad.

Piano Magic, como algunos otros grupos coetáneos, hubiera sido uno de los otrora denominados “super-grupos” si hubiera actuado en los 70-80. pero como quiera que empezaron a despuntar cuando ya morían los 90 y el mismo siglo, se conformó con convertirse en uno de los fenómenos más destacados del llamado post-rock de finales de los noventa, cuando nos dejó literalmente paralizados con aquel Low Birth Weight (1999), que ya era su tercer disco.

Desde entonces han transitado un gran abanico de estilos, pero si hemos de definir su música, se puede hablar de una propuesta bastante ecléctica, mística y etérea, a veces algo fantasmagórica, con tonalidades claro-oscuras, mutando constantemente desde los sonidos electrónicos a los eléctricos, pasando por momentos etéreos y melancólicos del dream-pop, de las bellas melodías, a los sonidos oscuros del dark-wave, gótico y barroco. En fin, tan sólo son etiquetas, definiciones, que estamos obligados a dar para que podamos hacernos una idea de su amplio universo.

Pero, siempre, lo mejor es sumergirse en alguno de sus discos y dejarse llevar, perderse en su atmósfera, unas veces más densa que otras.Y para ello, nuestro consejo es empezar por cualquiera de sus dos anteriores trabajos Disaffected (2005) o Part-Monster (2007), aunque igualmente podemos ir directamente a su nuevo disco Ovations (2009), donde vuelven un poco a esos ambientes más siniestros, y donde además colaboran Peter Ulrich y Brendan Perry, de Dead Can Dance.

Escucha como comienza cualquiera de los tres discos que hemos mencionado. Te puedo asegurar que los pasajes instrumentales son totalmente vivos, emocionantes y perfectos en instrumentación. El sonido es implecable: en un buen equipo de música, te quedas sin habla cuando súbitamente acaba la canción... y tardas luego un tiempo en reaccionar y en volver de nuevo a la cotidiana vida de la que partiste cuando le diste al play. Cuando logras recuperarte, una bella melodía muy arreglada te envuelve, se mete dentro de tí; después, te abraza con esos brazos que surgen de la nada, y te lleva a realizar un viaje a través de paisajes improbables.

Piano Magic está formado por dos palabras: piano y magic. El piano puede representar la música en estado puro y, realmente, su música, puede ser la simbiótica banda sonora de la magia…

lunes, 2 de noviembre de 2009

Taken By Trees - East Of Eden

Hoy os proponemos hacer un viaje al Este del Edén. Preparad vuestra imaginación, limpiad vuestra mente de prejuicios, aparcad por un momento las noticias de la prensa y de los telediarios, subios a vuestra alfombra mágica virtual y preparaos para viajar al “país de las mil y una noches”. Hemos de admitir que este es uno de los discos que mayor sorpresa nos ha causado en los últimos meses, quizá por que no lo esperábamos de esta guisa; por su valentía, su esencia y su originalidad nos parece uno de los mejores de este año.

Hay que decir, no obstante, que siempre tenemos grandes expectativas por lo que pueda hacer alguien con la personalidad y el carisma de la sueca Victoria Bergsman, a la que seguimos desde su etapa en The Concretes. Que bello aquel Warm Night, uno de los himnos de EL BOSQUE de siempre.

Cuando llevaba grabados dos discos con The Concretes, en su mejor etapa, Victoria se cansó -prácticamente abandonó al grupo en plena gira- y creó un nuevo proyecto llamado Taken By Trees. En la transición, participó en una canción que dio la vuelta al mundo: Young Folks, con Peter, Bjorn And John, quienes además produjeron y participaron en la construcción de ese primer disco Open Field (2007) de Taken By Trees.

La escocesa Tracyanne Campbell (Camera Osbscura) –otra de nuestras favoritas aquí- siempre tuvo muy buena relación con Victoria Bergsman y, dado que incluso sus timbres de voz se parecen mucho, en alguna gira Tracyanne ha sustituido a Victoria en la interpretación de ese archi-conocido tema Young Folks al que antes hacíamos referencia. E incluso una de las mejores canciones de ese primer trabajo de Taken By Trees (Lost And Found) era un regalo suyo.

Y ahora seguimos con nuestro viaje a Este del Edén, pues así se llama el segundo trabajo de Victoria Bergsman con su proyecto Taken By Trees, grabado en Pakistán, con aventuras de por medio y hasta con mini-documental del National Geographic...

El disco está impregnado de una atmósfera barnizada por finísimos tintes orientales, lo que se nota en general en toda la muy buena instrumentación de este trabajo, pero ahí está la melosa y delicada voz de Victoria, que se hace con el nuevo contexto y resulta totalmente creíble. Grandes ideas, imaginación, detalles, excelente sonido y muy buena música.

El disco suena de maravilla, se percibe que en su concepción han participado excelentes músicos locales que le dan una connotación especial. Cuenta, además, con la contribución de Noah Lennox, uno de los mejores músicos de vanguardia que existen en la actualidad. Forma parta de la exitosa banda Animal Collective y, en solitario, lidera un gran proyecto denominado Panda Bear. Esa contribución se llama “Anna” y es una canción increíble, distinta, hipnotizante. Tiene este artista un peculiar don para hacer canciones que son tremendas y las dota de una ornamentación que las hace parecer frescas, nuevas, a pesar de usar bases de pop clásico. Otro ejemplo podría ser ese "Walkabout" que aparece en el último disco de los Atlas Sound, otro de los discos del año.

Victoria, también hace una excelente versión de tema My Girls (aquí lo llama My Boys) de Aninal Collective y la hace más pop, más directa, más ligera, pero aún excelente.

En este pequeño, aunque denso trabajo, hay muchas ideas, mucha creatividad, mucha música, toques étnicos, pop-folk del bueno y una excelente grabación. Un disco disfrutable y muy recomendable:: lástima que sólo tenga 9 canciones, pues nos quedamos un poco con la miel en los labios…





http://www.myspace.com/takenbytreesmusic
http://www.takenbytrees.com/