viernes, 27 de septiembre de 2013

Alan Parsons Project


Subidos en nuestra particular máquina del tiempo, nos vamos a ir ahora a mediados de la década de los 70. Eran tiempos donde el rock sinfónico de carácter conceptual era una de las opciones musicales que reinaban en el panorama musical.

En 1975 surgen Alan Parsons Project , donde el propio Alan se rodea del compositor y cantante Eric Woolfson y de Andrew Powell, encargado de las orquestaciones.

Parsons no era un advenedizo. Decidió lanzarse a hacer su propia música después de haber sido ingeniero de sonido en la EMI, participando en la grabación de obras míticas como  el  Abbey Road de los Beatles, el Dark Side Of The Moon de Pink Floyd o el Year Of The Cat de Al Stewart por citar algunos que nos parecen muy relevantes. Ahí es nada...

Alan Parsons Project debuta en 1976 con Tales of Mystery and Imagination, un disco basado en las narraciones extraordinarias de Edgar Allan Poe. Continúa con el maravilloso I Robot (1977), trabajo en el cual adaptaba relatos de ciencia-ficción del escritor y científico Isaac Asimov y a continuación llega  Pyramid (1978), dedicado a narraciones de leyendas y misterios.

Todo esto a modo de introducción. Nos detenemos aquí,  porque no queremos dar cuenta de la biografía y discografía de estos músicos, ampliamente  documentada en Internet. Lo que queremos traer a nuestro espacio -y queremos que sean las verdaderas protagonistas- son dos de las mejores canciones que, en nuestra humilde opinión, nunca han sido escritas. Se trata de Don't Let It Show, del disco I Robot y Shadow Of A Lonely Man, que pertenece al Pyramid.

Sentaos, relajaos, poneos cómodos. Ajustad vuestros auriculares y subid un poco el volumen. Son una verdadera obra de arte y por ello queremos compartirla con todos vosotros. Esperamos que os gusten.


 

jueves, 26 de septiembre de 2013

Beach House – Bloom

 
Beach House, sin duda una de los mejores propuestas pop que hemos escuchado en los últimos tiempos. Su carrera, de la que ya nos hemos hecho eco aquí en EL BOSQUE, ha tenido una clara, vertiginosa y yo diría que prodigiosa proyección hacia arriba, sonando cada vez mejor,  matizando y reafirmando más y más su estilo en cada entrega.
Han pasado de ser una propuesta interesante allá por 2006 cuando debutaban, que mejoraron con aquel magnífico Devotion (2008), a alcanzar una cima creativa difícil de superar con el maravilloso y ensoñador Teem Dream (2010) que han mantenido de forma sublime con el nuevo disco Bloom (2012), manteniendo un regularidad –un disco cada dos años- sin desgaste alguno, más bien al contrario.
Desde luego, el sonido es fascinante y lo consiguen a base de crear unas atmósferas íntimas, personales y totalmente emocionantes. Impresionante conjunción de teclados y guitarras quasi extraterrestres que te transportan a un lugar repleto de sueños, de paisajes multicolor solo imaginados en otros mundos,  donde se tejen auténticas capas de sentimientos y emociones, capaces de atravesar la densa niebla para acabar por penetrar en tu alma. Te sientes flotar, diríase que ingrávido, y el tiempo parece pasar a distinto ritmo cuando logras meterte dentro del pequeño mundo que crean con cada una de sus canciones.  Verdadera orfebrería, verdadera odisea 2012 en el espacio musical.
No es épica, sobreproducción o grandilocuencia; tan solo es pop, puro pop, el arte que tanto defendemos en este espacio haciéndose justicia a si mismo, alcanzando el éxtasis, reivindicándose como una de las mejores cosas que el ser humano es capaz de hacer.

Alex Scally y Victoria Legrand, el dúo de Baltimore que responden al infantil nombre de Beach House,  nos han vuelto a dejar enamorados,  anonadados y ya nos sabemos dónde puede estar su límite creativo.
El disco ya te deja boquiabierto cuando, nada más empezar, irrumpe la trepidante Myth que fue el tema que la banda ofreció como adelanto de este trabajo, con un ritmo fácil de digerir, muy directa,  contagiosa. La fiesta no ha hecho sino empezar. Los invitados van llegando poco a poco y el disco está lleno de momentos brillantes y notablemente inspirados.
Pero nuestra parte favorita está al final del mismo, totalmente antológica, con ese trío compuesto por Wishes, On The Sea (apoteósica, exultante, no os la perdáis) e Irene.
Hemos entrado a su página web y nos ha encantado ver ese corto/documental grabado en el desierto de Texas, producido por Pitchfork TV, llamado Forever Still. Tiene como inspiración el Live at Pompeii de Pink Floyd, cuya evocación  hace que aún nos parezca más maravilloso, esa simbiosis, esa búsqueda de conjunción  entre su música y esos paisajes desolados, sin aparente vida, donde ésta emana de la música.

 
 
 

 

 
 Escucha el disco en Spotify
 

lunes, 16 de septiembre de 2013

Camera Obscura - Desire Lines


Un nuevo disco de Camera Obscura es una garantía de calidad y siempre sabemos que vamos a estar ante un trabajo bien hecho, serio y, a la vez, dulce, amable y delicado. Sabemos que vamos sobre seguro y que estamos ante una gran creación.
 
Es una banda que ya lleva mucho tiempo en el mundillo musical y también con nosotros aquí en este espacio. Es un emblema, un buque insignia aquí en EL BOSQUE y qué mejor forma de volver a escribir en este nuestro personal y querido rincón, tras un tiempo sin poder postear por diversas razones.

Camera Obscura suelen espaciar varios años sus discos, se dan tiempo para elaborar sus trabajos y para hacer buenas canciones. Incluso a veces nos entran dudas de si retornarán o si pensarán que ya han dicho su última palabra y acabarán dejándolo. Cuántas veces hemos visitado su web a la espera de noticias suyas, o cuántas otras hemos navegado por Internet en busca de novedades acerca de novedades… pues pasaba y pasaba el tiempo y no había nuevo disco...

Afortunadamente han vuelto, siempre lo hacen... y, aunque esta vez determinados problemas personales les han retrasado algo más de lo normal, aquí están de nuevo con nosotros. Cuatro años son muchos sin sacar nuevo disco y ya se nos empezaban a hacer eternos.

Esta vez se han ido a grabar a Portland, Oregon, de la mano de Tucker Martine (Spoon, Sufjan Stevens, The Decemberists o R.E.M.) y han colaborado vocalmente Neko Case (The New Pornographers) y Jim James (My Morning Jacket).  Arreglos preciosistas y unas melodías cuidadas, en definitiva grandes canciones compuestas por Tracyanne Campbell, de una sobriedad impresionante, milimétricamente ejecutadas por la banda que se conoce desde hace mucho tiempo y con ese toque personal de su exquisita, sutil y especial voz, que está mejor que nunca..



Desire Lines (2013) es su nueva entrega y, ante todo, es un disco de madurez, donde el sonido y el concepto musical del grupo alcanza una mayoría de edad y una solidez, con una frescura envidiable. No tiene esos hits a los que nos tenían acostumbrados y que entran de repente, pero es un trabajo muy cohesionado y hay que saborearlo poco a poco; suena tan radiante y soleado como siempre, a la vez que, si así lo prefieres, deja espacio para escucharlo en el recogimiento de tardes lluviosas, mientas observamos el recorrido de una gota de agua en un cristal empañado. Son ellos, son Camera Obscura, una de las mejores bandas de pop del panorama musical.


 
 

Camera Obscura en KCRW (Live)