miércoles, 28 de octubre de 2009

Grand Archives
Keep in Mind Frankenstein

Keep In Mind Frankenstein es el segundo disco grande de Grand Archives, los cuales ya son unos viejos conocidos de este espacio, a pesar de su todavía corta carrera musical. Son el proyecto musical de Mat Brooke, miembro además de Carissa ‘s Wierd y que abandonara Band Of Horses, aquella banda que tan buena crítica generalizada obtuvo por su disco de debut.

El contenido del álbum es muy similar al ofrecido en su primer disco homónimo de 2008 del que ya nos hacíamos eco en su día aquí en EL BOSQUE.

Como aquél, es un disco muy bueno para aquellos amantes del pop con armonías vocales y con toques folk. Una colección de gratas melodías de base acústica y tono agridulce, con tiempos más bien tranquilos. Piezas pop bien construidas, delicadas, algún toque psicodélico, con cierto sonido otoñal y melancólico en la entrada de un otoño que sigue sin querer llegar.

El disco empieza magistralmente, pero necesitaría algo más de nervio, de empuje, de pegada…quizá algo más de alternancia rítmica, sobre todo en su segunda mitad.

Pero definitivamente, un gran álbum, de placentera escucha, muy bien construido y uno de los discos mágicos de este 2009, que ya lleva unos cuantos…



http://www.grandarchives.com/
http://www.myspace.com/grandarchives

viernes, 23 de octubre de 2009

Richard Hawley - Truelove’s Gutter

Hace poco más de un año os presentábamos a uno de nuestros personajes favoritos aquí en EL BOSQUE: Richard Hawley.

Ya lo decíamos entonces: si le conoces, es muy probable que, entre tus canciones favoritas de siempre, incluyas unas cuantas de este artista que compone a las mil maravillas y cuyo trabajo es pura orfebrería pop.

Su música es sentimental, cálida, romántica, profunda, llena de detalles; escuchar a Richard Hawley siempre es una experiencia absolutamente emocionante y que te hace sentir vivo, porque te toca directamente en el corazón. No te cansa, no se desgasta, por más que la escuchemos una y otra vez. Los arreglos, la cuidadísima instrumentación, la relajante voz… son un paraíso, un bálsamo, un remanso de paz para nuestro espíritu.

Si estás triste, puede ayudarte a ver que las cosas no siempre son tan negativas como te parecen, que la vida no tiene por qué ser siempre como ahora, que todo ha sido un pasajero bache, una mala racha: las cosas van a mejorar a buen seguro en los próximos días.

Si estás en un buen momento, nada mejor que esta música: te seducirá, te llegará muy dentro y te hará sentir que estás haciendo lo mejor que puedes hacer o, por lo menos, lo estás intentando. Su música puede hacerte ver la vida de otro color o desde otra perspectiva.

Richard Hawley acaba de estrenar un nuevo disco que lleva por nombre Truelove’s Gutter. No es un disco tan ligero, asequible y comercial como sus anteriores trabajos: tiene sólo ocho temas y hay dos que duran alrededor de los diez minutos y pueden otorgar densidad a este trabajo. Pero también tenemos joyas que están más en la línea habitual como Open Up The Door (que gran final) o For Your Lover, Give Some Time que, además, podrían estar entre las mejores canciones que ha compuesto en su ya larga trayectoria. Es curioso además comprobar como esas canciones nuevas más largas tampoco llegar a cansar; podemos pasar mucho tiempo absortos buceando en la magia de las melodías y los detalles y matices que ofrecen.

Y es que yo creo que la calidad compositiva e interpretativa aún sube más en este disco y demuestra que es un gran compositor con una gran personalidad interpretativa. La instrumentación es perfecta y es que la virtuosidad no sólo son punteos rápidos recorriendo escalas megapentatónicas o virguerías por el estilo, también cuenta –y mucho- lo que se es capaz de transmitir con los instrumentos y ese momento justo y preciso en que es colocado cada uno.

La música de Richard Hawley siempre es especial. A mí siempre me crea gran expectación un nuevo disco suyo, me pregunto: ¿con qué me va romper el corazón ahora?... Crea un clima en el que hace fácil, obvio y evidente lo que no es tan sencillo como parece. Si queremos evadirnos, nos transporta un paisajes lejanos; si preferimos quedarnos con las cosas cotidianas, nos edulcora la vida, nos acompaña en todo aquellos retos que afrontemos.

Sigue siendo una música asombrosa, aunque que no sea innovadora… pero no siempre todo tiene que serlo.




Lady's Bridge




Valentine




http://www.richardhawley.co.uk
http://www.myspace.com/richardhawley

jueves, 15 de octubre de 2009

Venice Is Sinking - AZAR

Nos ponemos cómodos y nos relajamos ahora con una propuesta musical que se nos antoja más propia de este tiempo otoñal que se resiste denodadamente a llegar, pero que debe estar a punto de llamar a nuestras puertas.

Se trata de una banda llamada Venice Is Sinking y su último disco AZAR. Esta vez nuestros visitantes son norteamericanos, vienen de Athens (Georgia) y han facturado un disco que es una pura delicia.

La música desplegada en este álbum es una suerte de pop sinfónico y orquestal, preciosista, pero sin grandes barroquismos ni sobrecargas. La delicada y cuidada producción es una parte importante, pero yo no diría que es la única protagonista. El contenido también es capaz de transmitir un montón de sensaciones; la creatividad, las ideas, las emociones, las canciones en definitiva, se dejan ver a través de esas atmósferas, irrumpiendo de atinada forma y emergiendo de esos pasajes instrumentales llamados Azar (partes 1 a 4).

La música que escuchamos nos hace visualizar un tiempo de otoño, con algunas nubes algodonosas salpicando el cielo, moviéndose rápidas a merced del viento, formando infantiles y caprichosas figuras. De repente, una de esas nubes tapa temporalmente la luz del sol, aunque de forma muy gradual; se mece una suave brisa, comienza a caer la lluvia: primero despacio, tímidamente; luego, más deprisa. El campo que se empapa ligeramente y se desprende ese olor a tierra mojada… Es el tiempo de los pasajes instrumentales.

Después, el sol se libera lentamente de la prisión de su nube y abre un claro a través del cual hace asomar de forma muy paulatina su tímida pero aún brillante luz; la fina capa de lluvia recién caída comienza a secarse, pero aún se moja la mano al pasarla con fuerza por la fina hierba que empieza ya a cubrir el campo… En ese momento, irrumpe in crescendo una suave pero tenaz melodía que se va apoderando del escenario y, poco a poco, la luz vuelve a reinar y todo se inunda de esa melodía, teclado, bajo, esas armonías vocales, atinados coros y con el aderezo de sutiles toques psicodélicos. Es el tiempo de las canciones.

Ya nadie recuerda que antes hubiera llovido…

<

http://www.veniceissinking.net/
http://www.myspace.com/veniceissinking

miércoles, 14 de octubre de 2009

Fanfarlo – Reservoir

Estamos ante uno de los mejores discos de este 2009. Buenas canciones, gran vigor y un sonido que parece muy seguro de si mismo. Se hacen llamar Fanfarlo.

El grupo está afincado en Londres, aunque su líder Simon Balthazar es sueco. Han venido publicando singles desde 2006 que han armado mucho revuelo en Internet y, por fin, tienen su disco de debut que lleva por nombre Reservoir.

Un trabajo sólido, consistente, con un sonido directo y sin complejos; con picos que están rozando lo lírico y lo épico. No es lento, ni especialmente romántico al uso –es más bien vigoroso- pero es seductor. Los arreglos de cuerda y viento están muy cuidados; buena instrumentación en general, buenas voces y la verdad es que el disco tiene momentos muy logrados y memorables estribillos.

No se pueden negar las reminiscencias a Aracde Fire aunque, a nuestro entender, Fanfarlo resultan algo más frescos y ligeros de escuchar. Algunos de sus pasajes musicales también tienen mucho parecido con la forma desenfadada de musicar las canciones que tiene una banda llamada Beirut.

En un gran disco, entra rápido, es emocionante a la par que trepidante y puede servir muy bien de banda sonora para acompañar aquellas de nuestras acciones en las que hemos de tomar alguna decisión. Curioso sentimiento éste el que nos produce su música…

Estoy escuchándolo ahora, mientras escribo estas líneas y, en eso, que acabo de leer una frase que nos envía un buen amigo de EL BOSQUE. No sé si por la belleza de la misiva o por la embriaguez lírica de Fanfarlo, creo que el escenario encaja a la perfección:

“cambié mis versos por tus besos una noche, y viví entre tus besos como un verso camuflado..." (1)

Gran simbiosis. Esperamos que lo disfrutes igual que nosotros…





http://www.fanfarlo.com/
http://www.myspace.com/fanfarlo

(1) El Último De La Fila. Pedir tu mano - La revelión de los hombres rana (1995).

jueves, 1 de octubre de 2009

Jason Lytle
Yours Truly, The Commuter

Hace tiempo que queríamos traer a este espacio a una banda tan especial como Grandaddy. Ha sido sin lugar a dudas una de las mejores y fundamentales bandas de finales de los noventa y principios de este siglo. De hecho, y aunque tienen otros discos igualmente notables, su disco The Sophtware Slump (2000) está considerado unánimemente por casi toda la crítica especializada como una de las obras maestras del pop de la última década.

Grandaddy se disolvía tras entregar su último disco allá por 2006. Aquel Just Like the Fambly Cat, si bien no fue un mal disco en absoluto, nos dejó a todos un poco fríos. Quizá por la rabia contenida de saber que algo tan especial tocaba a su fin, o quizá porque esperábamos más en el epílogo de un gran grupo como Grandaddy.

Jason Lytle, ex-lider de la banda, acaba de estrenar nuevo trabajo en solitario y ha venido con él a redimir nuestras atormentadas almas por la falta de su talento, el cual hemos recuperado con creces, a lo que se puede escuchar en este gran trabajo llamado Yours Truly, The Commuter (2009).

El “espíritu Grandaddy” no ha muerto y Jason Lytle acaba de entregar un trabajo grandioso, que va en la misma línea de los mejores Grandaddy, totalmente inspirado, continuista y fiel a su estilo.

Volvemos a escuchar su particular voz quebradiza, frágil, algo escondida tras la catarsis sonora que la que se hace arropar. Nos transmite melancolía a la par que luminosidad, en un paradójico duelo de sentimientos. Pero también nos hace sentir que esa clase de música pop bien construida, cuidando mucho los arreglos, tirando en ocasiones a lo sinfónico y con un sonido en apariencia analógico, se puede seguir haciendo siempre y nunca va a dejar de hacerse.

Jason Lytle sigue haciendo algo parecido a un pop-rock suave, escondido en un universo algo espacial. Electrónica inocente flota sobre las atmósferas acústicas, a menudo acompañadas de mágicos coros. Me recuerdan a una Electric Light Orchestra actualizada, con toques que nos pueden llevar a la sutileza sinfónica de Mercury Rev, aunque a veces aparecen pasajes más enérgicos, más cercanos a la parte rock de la genérica, ambigua y un tanto insulsa palabra “pop-rock”.

El disco no aburre para nada y tiene un variado repertorio: pop, rock, country, baladas, folk son los diversos caminos que va siguiendo. Pero todas las canciones son muy buenas; están arropadas bajo un manto cohesivo y unificador que les otorga carisma, solidez y mucha personalidad. Totalmente reconocible a varios años luz de distancia. La producción es meticulosa y el sonido es excelente. Todas estas cualidades siempre han sido marca de la casa, del estilo inconfundible de Jason Lytle.

En fin, nos visita hoy en EL BOSQUE uno de los mayores talentos musicales en su estilo que conocemos. Su obra musical es muy buena, muy bien construida y encima es fácil de digerir. Jason Lytle y su obra deberían estar en boca y conocimiento de muchos pero, por las razones que sean, no es así.

Aquí está nuestra modesta y pequeña contribución a que eso cambie y te ofrecemos la oportunidad de que disfrutes de este universo particular que sólo Jason Lytle sabe crear y que, cuando habíamos llorado su desaparición, regresa de nuevo con todos nosotros.

jueves, 30 de julio de 2009

Butcher Boy - React or Die


Es realmente emocionante y gratificante toparse de repente con un sonido pop tan directo y que es capaz de dar tanto en la diana como el que practican estos chicos que se hacen llamar Butcher Boy. Su música es de un tremendo vitalismo, colorido y está interpretada con una gran definición. Hacen unas canciones muy generosas, que se nos antojan muy definidas y totalmente faltas de complejos.

No comprendemos como joyas como este React or Die (2009) o su anterior trabajo Profit in Your Poetry (2007) no están al alcance de todos y difundidas por todos los medios. Menos mal que, aquí en EL BOSQUE, los hemos descubierto mirando debajo de las piedras y aquí estamos para divulgarlos a bombo y platillo.

Detrás de este grupo está John Hunt, el responsable de uno de los clubs indies más famosos de Glasgow, el National Pop League. Butcher Boy comenzó en 1998 cuando John enviaba poemas al periódico local bajo esa firma: “el niño carnicero”. Posteriormente, comenzó a tocar y componer canciones, hasta que formó la banda en 2005.

Me tengo que remontar bastante tiempo atrás para recordar un disco que entre tan a la primera. Sólo con escuchar las dos primeras canciones When I'm Asleep y Carve a Pattern entras en una especie de “climax pop”, que nos viene a explicar un poco el por qué nos gusta esto y le dedicamos tantas horas.

Es cierto que no se le pueden pedir innovaciones creativas, pero esto no es siempre necesario. Tienen una base tipo folk/pop muy bien construida y que nos puede sonar a algo ya escuchado en determinados pasajes, pero es indudable que saben hacer muy buenas canciones que logran enganchar, atrapar y emocionar. Toda una joya, con ciertos momentos más álgidos que otros, pero que no tiene ni un solo segundo de desperdicio.

http://www.myspace.com/butcherboymusic

viernes, 24 de julio de 2009

My Latest Novel - Deaths And Entrances

Nos gusta ofrecer y compartir buena música con todos vosotros y, cuando traemos algo por aquí, podéis estar seguros que se trata de una decisión muy meditada, que lo hemos escuchado muchas veces y que, a nuestro juicio, merece mucho la pena. No traemos cualquier cosa “a la ligera” ni nada que no haya sido convenientemente digerido y, por ello, a veces nos podemos demorar un poco en nuestras selecciones, las cuales a veces toman su tiempo.

Esperábamos ya con vehemencia este segundo trabajo de los escoceses My Latest Novel, después de aquel buen sabor de boca que nos dejaron con aquel excelente y sorpresivo -por lo creativo- debut llamado Wolves (2006). Siempre es difícil superar ese listón del segundo disco y más aún con el sólido y buen trabajo que hicieron entonces. Pero podemos decir que no nos han decepcionado, continuando en una línea muy similar, algo más evolucionada, pero igualmente evocadora e impresionante en este nuevo trabajo que han dado en llamar Deaths and Entrances (2009), el cual está entre los mejores discos que hayamos podido escuchar en lo que va de año.

No es una música para escuchar a la ligera, a modo de divertimento, pero no quiere decir ello que sea complicada o sofisticada. Simplemente es que tiene un montón de matices y que, cuando escuchamos atentamente los pasajes que componen cada pieza, se translucen muchas cualidades: intensidad, riesgo, creatividad y torrente sónico. Nada de canciones pop políticamente perfectas, con estructuras al uso o tirando de manual, sino temas con momentos ora intoxicados de dolor y rabia, ora destilando belleza y dulzura flotando en las cuerdas florales de sus instrumentos. Realmente hay partes en que llegas a pensar que realmente lo clavan. Sólo hay que escuchar temas como Sister Sneaker Sister Soul o The Hope Edition en el disco anterior o Lacklustre de este nuevo disco, para saber a que nos referimos.

La música de My Latest Novel tiene una marcada personalidad y no parece seguir manual ni guía de estilos alguna. Es de esos grupos que suenan a sí mismos y que pueden crear escuela. En sus canciones imperan los juegos de voces altamente trabajados para que casen de forma casi perfecta con sus brillantes arreglos de guitarra y las sutiles entradas de los violines en perfecta simbiosis con las melodías.

Las canciones forman un coherente y consistente collage, a veces un tanto bizarro, pero siempre con una música homogénea, construida con mucho talento y una auténtica apología a la melodía que, a veces, se inmiscuye en una ligera niebla que no oscurece ni emborrona el panorama que se divisa, porque hay chispa y hay innumerables bocanadas de aire fresco, de sol radiante y aparecen arco-iris por doquier.

Es una maravilla encontrar discos así, bien trabajados, hechos con ideas, con estilo y con ganas. My Latest Novel ofrecen una propuesta de pop que nos hacen seguir creyendo en esto.



http://www.mylatestnovel.com/
http://www.myspace.com/mylatestnovel

jueves, 16 de julio de 2009

Cats On Fire
Our Temperance Movement

En estos días hemos estado escudriñando entre las novedades más interesantes aparecidas este año, tratando de seleccionar lo mejor del pop actual para todos vosotros, de forma acorde con nuestro lema. Y, si nos queréis acompañar, os vamos a ir presentando aquí discos realmente majos en los próximos días.


Empezamos con el descubrimiento de una banda de POP directo y con mayúsculas: se llaman Cats On Fire y vienen al BOSQUE desde las nórdicas y lejanas tierras de Finlandia, lo que para nada hace fría su música.

Aunque en 2007 ya editaron un primer disco llamado The Province Complains (muy bueno también), nosotros los hemos conocido y nos han sorprendido más que gratamente con este nuevo Our Temperance Movement (2009).

Diez efectivos temas llenos de bonitas melodías flotando en una base de guitarras (incluso mandolina en el primer tema), adornados con la presencia de marcados bajos, teclados, coros pop al uso y la singular voz de su cantante, con un sonido que tiene ciertas e innegables reminiscencias ochenteras, si bien beben de todas las fuentes pop-rock más clásicas.

Magníficas canciones, llenas de inspiración y un variado repertorio que hacen que el disco no aburra en absoluto y que se escuche sin apenas darnos cuenta, teniendo que irremediablemente volverlo a escuchar una y otra vez. Pareciera que fabrican un pop-rock de manual, pero no por ello carente se sentimientos y multitud de sentimientos por transmitir.

En el capítulo de nuestras sensaciones subjetivas, nos transmiten ritmo, viveza, colores cálidos, alegría y ganas de hacer cosas. Son ideales para escucharlos en situaciones en las que estamos haciendo alguna actividad, por ejemplo alguna chapuza en casa, alguna labor rutinaria o entretenida y muy especialmente se nos antojan excelentes para escucharlos cuando estamos en carretera.

Dales una oportunidad. Si te gusta el buen pop de siempre, no te van a dejar indiferente…



http://www.myspace.com/catsonfiremusic
http://www.netikka.net/catsonfire/

lunes, 1 de junio de 2009

Descubriendo a Acid House Kings

Un buen día

Andaba yo escudriñando, hace ya algunos años, por los music blogs que empezaban a proliferar y a ponerse de moda por entonces. Era una forma real y, a la vez, impresionante para conocer una música que, de otra forma, nunca hubiera conocido ya que no se solía presentar en los medios más habituales como tv, radio, prensa, tiendas, etc.

En mi devenir por aquellos mundos, coleccioné una serie de canciones que me parecían interesantes, con el fin de escucharlas, desgranarlas, tranquilamente después todas juntas y con la esperanza de descubrir nuevas cosas. Un buen día, cuando por fin tuve un rato para dedicarles una primera audición, fui escuchando una tras otra, tomando mentales notas sobre este detalle de aquí o este otro de acá. Había cosas muy interesantes, que me invitaban a la búsqueda de nuevas informaciones sobre los artistas, pero…de repente, dos de esas canciones me dejaron sin habla. Las volví a escuchar: se llamaban Sunday Morning y This Herat Is A Stone. Eran pegadizas a rabiar, alegres, directas, sin barroquismos, sin complicados arreglos, sin “nada que entender” para disfrutarlas; eran simplemente fascinantes. Ese tipo de canción pop clásica, aparentemente sencilla, envuelta en una atmósfera de guitarra y piano, marcados bajos, ocasionales arreglos orquestales, coros precisos en un segundo plano, algún xilófono juguetón, percusión inquieta; bases sobre las que planea una delicada, sugerente, fresca y sutil voz femenina.

Comprobé de inmediato que esas dos canciones eran, en efecto, del mismo grupo: unos tal Acid House Kings. Estuve investigando un rato, a ver que información encontraba de ellos por ahí…no me gustaba mucho ese nombre, ni las poses de las portadas de sus discos, ni el diseño o las fotos que hay en su página Web… ¡Malditos prejuicios!, estuve a punto de abandonar y perdérmelos… pero aquellas melodías seguían brillando con luz propia y no se apartaban de mi mente, las escuchaba una y otra vez y no sufrían el consabido desgaste que esto produce. Al contrario, siempre me lograban emocionar y contagiar esa alegría de la melodía perfecta.

De modo que seguí escuchando cosas de estos chicos, escudriñando en su historia y en su música y estoy encantado de haberlo hecho. Empezaba una investigación que, afortunadamente, gracias a Internet podemos hacer hoy, sin esperar a que nadie te los vaya a dar a conocer en ningún medio, donde normalmente exponen como bueno aquellos productos que hay que vender.

A día de hoy aún sigo escuchando esas canciones y, cuando quiero alegrarme la vida o deseo una buena banda sonora ante algún reto que voy a acometer, son mis fieles compañeras. Y no sólo ellas, sino un buen puñado de muchas otras canciones casi perfectas que Acid House Kings despliegan en sus dos últimos discos. Vosotros también podéis escuchar ahora mismo una de estas canciones (Sunday Morning), pues es nuestra invitada en la sección UNA CANCIÓN, situada en la parte superior izquierda de nuestro blog. Sube, dale al play y déjate llevar mientras sigues leyendo.

Y queremos compartir en EL BOSQUE, como es habitual, nuestras mejores experiencias musicales y, entre ellas, no podíamos obviar a Acid House Kings.

¿Quién hay detrás de todo esto?

En primer lugar parece estar el origen: Suecia. Desde luego, el aspecto les delata. Ya son los muchos los artistas geniales que proceden de allí con un pop bonito, alegre, paradójicamente cálido, y con una tremenda inspiración para la melodía.

En segundo lugar, un tal Johan Angergård. (Club 8, The Legends, Poprace)... Dicen por ahí que es uno de los compositores pop clásico más inteligentes desde el punto de vista de las canciones directas y las melodías. Además, me encanta la instrumentación que pone como base, sencilla en apariencia, pero que le da una vida especial. A veces, aunque estés sentado escuchando esta música, descubres con asombro que tu cuerpo está allí, unos pasos más adelante, alegre, despreocupado, moviéndose rítmicamente.

De modo que Johan Angergård es el mismo que está en Club 8, junto a Karolina Komstedt… Ya decía yo, este dúo también me gustaba mucho y tiene varios discos realmente buenos. Sin embargo, es una propuesta algo distinta: más creación de atmósferas, más en busca de lo evocador, más electrónica, algo de niebla, aunque igualmente sutiles e inteligentes melodías. Ver nuestra reseña de su último disco The Boy Who Couldn't Stop Dreaming (2007).

La banda la completan su hermano Niklas Angergård (firma las composiciones junto a Johan), Joakim Ödlund y Julia Lannerheim, que ya colaboró en dos canciones en el disco que AHK editaron en 1997 y se incorporó a la banda en 2001, justo antes de grabar su excelente disco Mondays Are Like Tuesdays And Tuesdays Are like Wednesdays (2002). Un gran acierto y una de sus señas de identidad, dando una gran personalidad al grupo.

En 2005 editan Sing Along With Acid House Kings, con una grabación aún más perfecta y con una pegada igual o superior a su gran anterior disco. A mí me cuesta distinguir cual de los dos es mejor. Son dos verdaderas joyas del pop y dos auténticas apologías a la melodía.

Son canciones perfectamente estructuradas, con una gran base instrumental, donde ellos y ella se alternan en la interpretación de las mismas, dando una gran cohesión de grupo y un gran dinamismo. Las canciones van cayendo una tras otra y, al final, te quedas con apetito. No tienes por más remedio que volverle a dar al play de tu reproductor.

Es una pena que AHK no se prodiguen más, pero más vale así: poco y bueno. Quizá ahí esté también parte del secreto. La buena noticia es que hemos sabido que este 2009 están trabajando en una nueva obra. Así que por ahora seguiremos teniendo alegría, sol y melodía para rato. Ya los vamos necesitando, ya los vamos echando de menos… la vida sigue y queremos nuevas bandas sonoras como estas para que nos ayuden a transitarla….

http://www.acidhousekings.com/
http://www.myspace.com/acidhousekings

viernes, 8 de mayo de 2009

Descubriendo a The Czars

Llegamos con un Descubriendo a… que nos tememos que ya es a título póstumo, pues The Czars se han disuelto y parece que no vayan a volver, si bien nadie puede saber eso, pues tantos otros se han ido y luego han vuelto...

No obstante, queremos rendir el merecido homenaje a una banda que ha hecho muy buena música y a un John Grant, líder de la banda, que ha brillado a nivel compositivo y que está entre las mejores voces masculinas pop que conocemos, tanto por su timbre como por su sutileza a la hora de evocar los versos de sus canciones. Es un artista increíble. Cada tema que interpreta esta cargado de un sentimiento y una convicción emocional que sencillamente te descoloca.

Aunque The Czars ya llevaban algunos años anteriormente, los conocemos desde aquel magnífico Before... But Longer (2000), el cual era un álbum de corte algo intimista, con un pop rodeado de un halo de misterio, cierto ambiente nocturno, desprendiendo mucho carisma y sensibilidad; quizá algo pretencioso, sin centrarse en busca de una homogeneidad, tratando de tocar varios palos y queriendo resultar airoso en todos ellos. Pero, al mismo tiempo, que delicia que existan discos así, atrevidos, que deban ser escuchados con cariño, con atención, despacio, degustando, tratando de entrar en el mundillo que cada pieza propone.

Y esta es la línea general de la música de The Czars, sólo que con el tiempo se va abriendo más y se atreve cada vez con más cosas. Pero el manual para disfrutar de su música sigue siendo el mismo: escuchar, asimilar y desgranar. No utilizar como música de compañía, cual si de un hilo musical se tratara; escuchar, asimilar, digerir y disfrutar; no esperar la canción fácil…

Y en esa línea está el siguiente disco The Ugly People vs the Beautiful People (2001); la tónica es la misma, pero ahora algunas canciones brillan con más luz, te das más cuenta de su belleza en una primera escucha. La producción va mejorando y el flirteo con más instrumentos, registros y estilos es mayor. La banda parece que se asienta sobre más sólidos argumentos y aunque siguen transitando varios estilos, están muy cohesionados por la personalidad instrumental del grupo y, sobre todo, por la maravillosa voz del John Grant, que templa y manda. Sin duda, otro disco excelente y quizá algo más asequible que el anterior, con memorables canciones, con auténticos trallazos pop-rock.

Y tras dos discos tan seguidos, y tan buenos, enmudecen tres años. ¿Qué está pasando? ¿Van a seguir?, nos ponemos a husmear…quizá no sea lo deseable, pero son muchos los grupos que sacan un disco casi cada año y estos no aparecen, ¿qué estarán preparando? La verdad es que teníamos una gran expectación…

En 2004 tenemos la respuesta: nos dan en todas las narices con el grandioso Goodbye, un disco casi perfecto en composición e interpretación, sin complejos ni pasajes oscuros, atrevido, maduro, directo.

Con Goodbye finalmente encuentran su sitio en el espectro musical; es su obra cumbre sin duda y un disco que debería estar en los estantes de cualquier aficionado al pop de todos los tiempos. Siempre les adornó un romanticismo que, a veces, pudo leerse como decadente, pero esta vez han encontrado sus mejores momentos, jugando con los interludios electrónicos, con el folk, country-rock, con el soul, con el academicismo jazz, con los pasajes agridulces, sin aromas turbios, haciendo una música atemporal, impregnada de un clasicismo heredero de la mejor tradición pop-rock de siempre.

Y en 2006, llega la despedida (parece que definitiva)… editan Sorry, I Made You Cry y es cuando ya nuestro corazón no lo puede resistir y estalla. Un conglomerado de versiones, rarities o covers de temas muy bellos, deliciosamente escogidos e interpretados gloriosamente, con el toque personal que sólo la voz de John Grant puede dar. Tiene razón el título de este disco: “Cuidado…puedo hacerte llorar”. Y tanto. Debería tener una pegatina que lo advirtiera fuera, en la carátula del disco. Un disco excelente y evocador, delicado, a la par que sencillo y sin artificio. Un disco que te hace llorar, reír, soñar y que te levanta en esos momentos oscuros que todos tenemos.

En una pena que The Czars nos hayan dejado y que ya no hayan más discos, ahora que habíamos llegado al climax musical gracias a ellos y ahora que se encontraban en su mejor momento. Y es totalmente injusto que un grupo como este, con una música como esta, no se conozca y que ni siquiera se pueda encontrar apenas información sobre ellos en Internet, ni en casi ninguna parte.

Han desaparecido del panorama musical, ni siquiera ya tienen página Web… se han difuminado, ¿es para siempre? ¿dónde están ahora?... es como si un halo de misterio les envolviera…


jueves, 23 de abril de 2009

Camera Obscura - My Maudlin Career


Teníamos en mente hacer un “Descubriendo a…” dedicado a Camera Obscura aquí en EL BOSQUE, cuando nos ha sorprendido la salida de su último trabajo, excusa perfecta para inmiscuirnos de pleno en el mundo de esta banda ya sin más demora. De modo que…vamos allá.

Conocemos a Camera Obscura desde aquel primer y excelente disco llamado Biggest Bluest Hi-Fi (2002), con el que llenó de aire fresco los primeros compases de este siglo. Desde entonces, siempre ha sido una banda muy querida y muy seguida por nosotros y cuyos trabajos hemos esperado con vehemencia. Nuestras expectativas siempre han sido grandes ante sus nuevos discos; la impaciencia flirteaba con la ilusión a la espera de cada nuevo proyecto.

Cuantas veces habremos oído todos sus discos… da igual el estado de ánimo en que nos encontráramos: si estás anodino, cobras fuerza; si estás triste, lloras; si estás alegre, se te dibuja una sonrisa. Y, sin apenas darnos cuenta, muchas veces sorprendemos a nuestros pies que, independizados de nuestro cuerpo, se mueven rítmicamente a su aire, sin que aparentemente se lo hayamos ordenado. La vida merece mucho más la pena si tenemos para ella una banda sonora como esta.



Tras su excelente primer disco, pasaron con muy buena nota la etapa crítica del esperado segundo trabajo, aquel Underachievers Please Try Harder (2003). Recuerdo que pudimos adquirirlo aquel año en el FIB, festival en el que actuaban ese verano, antes de que el disco viera la luz. Esto era en agosto y, a primeros de septiembre, ya estábamos en la cola de la sala Clamores de Madrid para volverles a ver de nuevo. Tal era nuestro amor, cariño y casi devoción por la propuesta musical liderada por Tracyanne Campbell.

Este proyecto llamado Camera Obscura sin duda prometía, se hacía respetar y seguía sin defraudar. Iban ganando terreno poco a poco y, en nuestro país, se les tenía un especial cariño; ellos prodigaban sus actuaciones por estos lares y era fácil encontrar sus discos y EPs, pues pertenecían al sello independiente español Elefant Records.

Dejan pasar tres años y en 2006 Camera Obscura resistía también la prueba de fuego que siempre supone el tercer álbum, experiencia a la que muchos ya no sobreviven. Aquel esperadísimo Let's Get Out of This Country (2006) pasó con sobresaliente y les consagró definitivamente ante la crítica, si es que quedaba algún atisbo o sombra de duda, que por fin se rindió ante el talento de Tracyanne Campbell.


Algún día habría que hacer justicia y alguien tendría que colocar a esta enorme compositora en el lugar que se merece. No sólo canta muy bien, dotada de una voz sensual, dulce y personal, sino que compone a las mil maravillas y ya lo ha demostrado en innumerables ocasiones. Talento, ideas claras, profesionalidad, seriedad y calidad a raudales. Y cada vez lo hace mejor; sin perder la frescura incial sus composiciones van madurando con el tiempo. Sin temor a exagerar, podemos decir que es uno de los mejores talentos musicales pop acaecidos en lo que va de siglo.

Y nos llega ahora este My Maudlin Career (2009) y con él ya van cuatro dianas. Ahora, de la mano del sello independiente inglés 4AD. Tanto da. Demostraron ya hace tiempo que lo suyo no era pasajero, que no se casaban con las modas, que sabían hacer las cosas muy bien y han seguido siempre haciendo la música que les gusta hasta ahora mismo.

Hoy por hoy, existen muy pocos grupos en el mundo a su altura en este estilo, y que sean capaces de grabar discos tan fantásticos como los que nos entregan ellos una y otra vez. Y todo ello, salpicado con un sin fin de EPs con canciones nuevas que han elaborado siempre entre disco y disco a lo largo de su ya extensa carrera.

No, no se trata de sacar un disco al año por narices; es mejor sacar cuatro discos por década si así se mantiene el nivel de calidad, la filosofía y se mantiene fresco el espíritu del proyecto. En My Maudlin Career encontramos otros 11 temas de tinte predominantemente alegre, elegante, atemporal, pero con estilo propio, reconocible, sin perder su característica personalidad. Se combinan estos pasajes con otros más lentos y emocionantes, con impresionantes arreglos de cuerda y, otras veces, tiran más a una especie pop-folk más ingenuo, más jovial. Siempre buscando esa simbiosis entre lo más elaborado y lo más sencillo, colocando las canciones en el orden adecuado.

Indudablemente hay influencias, pero… ¿quién no las tiene?. Creemos que es totalmente lícito beber en las fuentes que se crean más afines, más idóneas o más acordes a los gustos o a la concepción musical de cada uno. Y está claro que los manantiales donde se sacia Camera Obscura son de aguas puras y cristalinas. Pero esto no es nada malo y no se trata de imitar a a nadie; más pronto ellos serían un modelo a seguir.


Foto tomada de su página web oficial
 
En todo el decurso de una obra de Tracyanne Campbell se mantiene una cohesión, una uniformidad y una solidez admirable. Lo cojas por donde lo cojas, pinches por donde pinches, hay calidad, hay esmero y hay un buen trabajo. Es una música que puedes oírla mil veces y no sufre desgaste, más aún pareciera crecer con cada escucha.

Y es que estamos, a pesar de su aparente sencillez –o quizá por ella-, ante uno de los grandes talentos pop que existen en la actualidad.

Camera Obscura, paradójicamente, llenan de luz nuestras vidas...