miércoles, 9 de mayo de 2012

Descubriendo a Camel


Hoy queremos reivindicar la obra de una banda de rock de los 70 que, dada la vorágine de super-grupos compuestos por grandes músicos que pululaban por esa época, ha podido pasar desapercibida para más de uno y lamentablemente quizá mucha gente hoy piense que le hablamos de una marca de tabaco cuando le nombramos a… Camel.

Camel es una banda británica que empezaba su singladura musical al inicio de la década de los 70 siendo, por tanto, una de las pioneras del llamado rock progresivo mo rock sinfónico, como lo hemos llamado toda la vida.

En 1971, después de algunos cambios, ya estaba lista la formación clásica de la banda y su nombre ya definitivo. Camel estaban compuestos por Peter Bardens  (teclados), Doug Ferguson (bajo), Andy Ward (batería, percusiones)  y Andy Latimer (guitarra, voz). Enormes músicos, como tendremos ocasión de comprobar a nada que indaguemos un poco en su obra.

En especial el dúo creativo formado por Latimer y Bardens, autores de la práctica totalidad de la música del grupo, marcaron el rumbo y el concepto musical que siguieron durante casi toda la década.

En 1973, sacan su álbum homónimo de debut. La línea que iba a tomar su música comienza a tomar cuerpo.


Never Let Go


Buen debut y ya mostrando un gran aplomo. Y lo mejor estaba por llegar, pues a a este disco le siguen enormes obras como Mirage (1974), The Snow Goose (1975, uno de mis discos favoritos de todos los tiempos) y Moonmadness (1976). Pues vamos allá con ellos.

Ahora sí, poneos cómodos y preparaos para disfrutar de la música...

Spirit on the Water



The Snow Goose
 
A esta maravillosa trilogía le siguieron Rain Dances (1977) y Breathless (1978) en los que, aunque cuentan con grandes temas, empieza a notarse un cambio en el rumbo que hasta entonces llevaban, quizá tratando de conseguir un mayor éxito o un mayor abanico o de público, girando hacia una vertiente más pop.  A mí estos discos me parecen más flojos y rompen un poco con la obra conceptual que habían venido haciendo hasta el momento. Evidentemente, Algo no estaba transcurriendo como debía.

Y en 1978, Bardens decidió dejar la banda por sus crecientes diferencias con Latimer, justo en el momento en que la creatividad del grupo seguía siendo enorme y podíamos estar esperando ya el disco del siglo por parte de Camel. Es lamentable para los que adoramos la buena música, pero episodios como este suelen suceder frecuentemente cuando en un grupo hay varios líderes carismáticos.

Rain Dances
 
 
Como comentábamos, los años 70 eran la época dorada para este tipo de música y quizá los Camel quedaron algo eclipsados, pero estos discos son auténticas joyas del género. Música total 100%. Supieron combinar elementos tomados del jazz, mucho de la música clásica y barroca;  gran creatividad y enorme inspiración para crear obras que sonaban de auténtica locura.

Los pasajes instrumentales que creaban estos músicos eran exquisitos, demoledores, de los mejores que he podido escuchar nunca. Y además los ejecutaban con una perfección que pareciera apoyada en una gran tecnología, con una cohesión sorprendente. Si te gustan los cambios, los distintos ritmos, entradas y salidas de instrumentos, cambios de intensidad, preludios, nudos y desenlaces musicales, pinceladas y atmósferas varias… Si crees que todo eso puede ir contigo, Camel te va a sorprender. Te llevan de un ambiente a otro sin que apenas te des cuenta. Además, su directo es impecable, una interpretación que casi no se distingue de sus trabajos en estudio, salvo por su mayor frescura aún.

A partir de 1978, la banda siguió adelante capitaneada ya sólo por Andy Latimer y con la inclusión de varios nuevos músicos. Muchos son los que pasan por la banda. Siguieron haciendo buena música, pero ya era más a ráfagas, sin la cohesión y la magia anterior. Destacar aquel maravilloso Nude (1981) basado en la historia de un soldado japonés que se mantuvo oculto durante varios años después de acabada la Segunda Guerra Mundial, sin saber que ésta ya había acabado. O aquellos grandes temas que contenía el Stationary Traveller (1984), pero alternando con otros menos inspirados.


En la historia del rock hay muy buenos guitarristas, todos tenemos en mente unos cuantos. Pero nadie piensa en Andy Latimer  como uno de ellos y yo he de decir que a mí es uno de los que más me gusta y me conmueve. Su forma de tocar la guitarra, es una de las más perfectas en ejecución que he escuchado nunca. No se trata de lo que normalmente se entiende por un buen guitarrista de rock al uso, habitualmente el más rápido punteando, recorredor del mástil a la velocidad del sonido, creador de diabólicos riffs o aquél que toca desde cualquier postura. Para mí Andy Latimer es poesía, es un guitarrista que tiene una forma de tocar totalmente evocadora, sutil y que logra transmitir con la guitarra un gran sentimiento, un sonido al que sólo le falta hablar. Podéis comprobarlo en los vídeos que más abajo proponemos.

Camel eran muy buenos, pero quizá abusaron un poco de lo instrumental. En mi opinión, les faltó esa pegada en forma de hit, esa canción más pegadiza que les abriera el terreno, que funcionara a modo de single y así ellos poder seguir haciendo la música que les gustaba y sabían hacer tan bien. En 1972, cuando estaban grabando su primer disco con la MCA Records (antes de fichar por la Decca) les propusieron fichar a un cantante. Tras escuchar a 30 candidatos, decidieron declinar la propuesta y asumir ellos mismos la tarea de cantar. Aunque entonan bien, sus voces son algo apagadas y no tienen excesivos registros. Yo creo que eso les perjudicó, porque una voz carismática les hubiera dado un plus, ese pequeño punto más que necesitaban... o quizás no. Todo esto no son más que opiniones mías no contrastadas y totalmente subjetivas, pergeñadas durante los años que llevo escuchando al grupo y en la creencia de que no se ha hecho justicia con su música.


Camel es un grupo grande y tuvieron una etapa en que bordaron la música y, aunque ahora ya no están  y diversas desgracias personales han acaecido sobre varios miembros del grupo, para nosotros siempre estarán ahí. Un pedazo de nuestro corazón les pertence y para pagar tal tributo hemos escrito estas líneas y queremos además que vuelvan a tocar para nosotros aquí hoy en EL BOSQUE.

¿Os cuento un secreto? En mi época de fumador, hubo un tiempo que yo siempre buscaba y, si los encontraba, fumaba cigarrillos de la marca Camel… ¿adivináis a qué podía deberse eso?

Y ahora os dejamos con la música, o lo que es igual, con Camel.

"The Snow Goose", "Friendship" and "Rayader Goes To Town" register, tapped May 9, 1975, at BBC studios.

Hasta pronto...
Loog Goodbyes

6 comentarios:

Jose dijo...

Uf, has dado en el clavo, Mauri. Camel es uno de mis imprescindibles. ¡Cuántas veces habré escuchado The snow goose, Breathless, Mirage...
¡Gracias!
(por cierto, por introducir el debate: no es lo mismo rock sinfónico que rock progresivo... ¿o sí?)

Maurus dijo...

Hola Jose, gracias por tu comentario y me alegra que te gusten Camel... ya no me siento tan solo ;-)

No me gustan mucho las etiquetas, pero algo hay que usar como referencia. Yo siempre había entendido a este tipo de música como "rock sinfónico", pero últimamente veo que es tratado bajo "rock progresivo", por lo que colijo que es básicamente el mismo tipo de música y también veo que se está refiriendo a los mismos grupos.

En definitiva, un estilo en el que prima el virtuosismo de los músicos, la complejidad y los desarrollos más o menos enrevesados en lo instrumental y en lo conceptual. Aquí pueden caber bandas como Camel, Pink Floyd, Génesis, Yes, Jethro Tull, etc.

Pero cada uno de ellos es un mundo y por eso las etiquetas son injustas, pues parece que todos los que están clasificados en una de ellas son parecidos y hay miles de maticies diferntes en todos los órdenes entre Pink Floyd y Camel, por citar un ejemplo. Y es que puede haber grupos que siguen una misma línea, pero estos monstruos musicales tienen vida propia.

Un abrazo,

-Maurus

JOAKO dijo...

Buuunisimos Maurus,

Yo desconocía la existencia de este grupo, quizás porque nací en el 78, pero desconocía su existencia. Gracias Maurus por aportar luz a mi desconocimiento. O debería decir...por aportar..."humo", como se llaman CAMEL, jejejej

Maurus dijo...

Naciste el mismo año que Peter Bardens dejaba la banda. Curioso. Pero la buena música es atemporal...

Me alegro que los hayas descubierto gracias a EL BOSQUE. Es uno de nuestros objetivos y ya sólo por eso merece la pena seguir trabajando aquí.

Un saludo,

-Maurus

Corallium dijo...

Me han gustado muchísimo, The Snow Goose esta genial, tiene influencias de la música celta yo creo, o a mi me lo parece, bueno me encanta. Otra que es una chulada es Missing, y ni que decir tiene que Truibuto to Camel’s de Andrew Latimer es una pasada, ¡¡como toca!!

GRACIAS MAURUS. ABRAZOS

Corallium

Maurus dijo...

Hola Corallium, me alegro que te gusten nuestras propuestas y parace que esta de Camel ha tenido éxito... Nos prodigaremos más invitando a viejos monstruos de la música por aquí.

Un abrazo,

-Maurus