domingo, 5 de abril de 2009

Sara Lov - Seasoned Eyes were Beaming

Ni que decir tiene que Sara Lov es una de nuestras artistas favoritas desde siempre aquí en EL BOSQUE, donde durante much0 tiempo ha figurado como cabecera esa excelente versión que realiza del tema My Body Is a Cage, de Arcade Fire, casi ya un himno de nuestro blog. Sara le da un toque muy personal a esta canción y hacer parecer que ha sido compuesta para ella.

Para no repetir su historia, os invitamos a visitar la reseña que hicimos en su momento sobre Devics, el grupo de Sara Lov, junto a Dustin O’Halloran, un auténtico músico y pianista clásico que se ha dado a las composiciones de piano y orquesta y que, aunque no lo sepamos, ya le conocemos. Por ejemplo ha compuesto música para la banda sonora de la película María Antonieta, Lost in Translation o para el anuncio del Audi A5.

Y mientras tanto, Sara Lov, inciaba su carrera en solitario con un EP titulado Three Songs (2007), al que siguió The Young Eyes (2008), mientras finalizaba su primer disco grande Seasoned Eyes were Beaming (2009).

Aunque Dustin sigue ahí detrás componiendo alguna de las canciones de este nuevo disco, la producción corre a cargo de Zac Rae y ahora la música se aleja –aunque no en demasía- de ese aire sinfónico, nocturno y de cabaret característico de Devics, y transita y se inmiscuye un poco más en territorios pop-folk algo más frescos.

No sabemos si podrá conseguir algo más de repercusión en la crítica con este pequeño viraje. Ojalá que así sea.

Hay que reparar en la belleza de la voz de Sara, en sí misma un instrumento más y que, sin ser extremadamente potente, con sólo su prodigioso timbre todo lo arrasa y su plano flota y predomina sobre la ya rica instrumentación. No se come el instrumento a la voz; es ésta quien devoraría al instrumento, si éste no está listo y se descuida. Y esa simbiosis perfecta de esta voz y la rica base musical sobre la que se apoya, nos sigue poniendo los pelos como escarpias y nos parte el corazón. Es de una belleza inconmensurable y se nos antoja prácticamente insuperable, dando de lleno en nuestro concepto de cómo debe ser una canción pop cuando, como éstas, están en busca de la perfección.


Suena como la miel, lírica, conceptual, llena de poética tristeza, pero a la vez resulta aparentemente simple. Cuando algo parece tan fácil y es a la vez es tan bonito, reconocemos al genio de la lámpara y empezamos a creer en las brujas que puedan haber creado esta magia. Que lo fácil parezca tan obvio, nos hace pensar que algún duende se esconde detrás.

La única pega que le encontramos es que ha tardado demasiado en salir este disco. Desde el último trabajo de Devics (Push The Heart, 2006), tras el cual ya se anunciaba que Sara lo intentaría en solitario, ha pasado demasiado tiempo. Se nos ha hecho eterna la espera y además, en el camino, Sara ha ido goteando canciones en su Web, vídeos en Youtube con actuaciones donde estaban estas muevas canciones, varios EPs de adelanto… y cuando por fin ha llegado su nuevo disco Seasoned Eyes were Beaming, pocas canciones nos faltaban por conocer de las 10 (que se nos antojan pocas) que presenta el disco. Así las cosas, el impacto ha sido menor, y gracias a eso aún nos podemos todavía levantar de la silla después de su audición.

El disco es una joya donde las haya y nos tememos que pasará desapercibido, como tantas otras, pero para eso estamos aquí en EL BOSQUE, para descubriros y para desempolvaros este tipo de tesoros...

Los dibujos que podemos encontrar en el arte (cubierta e interior) de este disco son obra también de Sara. Son una preciosidad, muy armónicos y muy sensuales. Dentro, el diseño es original, salpicado de estos dibujos, incluso serigrafiados en el propio CD, y contiene un libreto con las letras de las canciones, el detalle de compositores e intérpretes y todo ese tipo de información que esperamos y que, muchos artistas, ya no cuidan y se limitan a un parco CD en un cartón.

Os dejamos con la canción que da título a este disco Seasoned Eyes were Beaming, en una versión simplista y casera, con Zac Rae al piano y probablemente grabada a micrófono desnudo, sin nigún tipo de arreglo. A pesar de ser totalmente minimalista, nos damos cuenta de la belleza de la composición y de lo que la voz de Sara puede llenar un espacio semi-vacío. Realmente precioso.


Sara Lov ya tiene listo el vídeo de A Thousand of Bees


Sara Lov:

http://www.saralov.com/
http://www.myspace.com/saralov

Precioso documento:

Sara Lov en KCRW (30 de Marzo de 2009)

Dustin O'Halloran:

http://www.dustinohalloran.com/
http://www.myspace.com/dustinohalloran

Devics:

http://www.devics.com/
http://www.myspace.com/devics

martes, 17 de marzo de 2009

Antony and the Johnsons - Crying Light

Antony Hegarty, Antony And The Johnsons, es uno de esos artistas que pueden calificarse de especiales. Podríamos tratar de buscar reminiscencias y seguramente algunas encontraríamos, pero no sería justo. Su personalidad musical compositiva e interpretativa está fuera de toda duda; es sencillamente aplastante y, al contrario que buscar comparaciones, es él quien nos deja su personalidad, su impronta, su aplomo, su referencia y su sello personal.

Han pasado ya más de tres años desde que nos cautivara a todos –propios y extraños- con aquel fantástico I Am a Bird Now (2005), ganador del premio Mercury Music Prize. Además, uno de los temas de este disco (Hope there’s someone) aparecía en la banda sonora de la película “La vida secreta de las palabras” de Isabel Coixet.

Y ahora, en 2009, The Crying Light es uno de los discos más anhelados del año. No hay que buscar muchas innovaciones en este nuevo disco, pero tampoco las esperábamos. Ahí está su personal registro vocal, sus íntimos lamentos; canciones de tono melancólico, emocional, llenas de alevosa nocturnidad; canciones atormentadas, líricas, a veces oníricas, a veces con esa luz que sale de una densa niebla que, poco a poco, se va disipando. Canciones, en fin, marcadas por su peculiar voz, sobre una rica instrumentación siempre con ese aderezo de cuerdas envolvente y siempre arquitectónicamente sustentada por un armazón de piano.

En la portada del disco nos encontramos con una impresionante imagen del bailarín de Butoh (danza de la oscuridad), Kazuo Ohno, tomada por Naoya Ikegami en Tokio en 1977. Su llamativo rostro y postura reclinada dicen que invoca simultáneamente la cuna, la sepultura y la trascendencia. El propio Antony comenta que, viendo actuar al bailarín, le vio emitir un círculo de luz sobre el escenario, meterse en el círculo, y revelar los sueños y meditaciones de su corazón. Parecía bailar en el foco de algo misterioso y creativo. Así pensó en llamar al disco The Crying Light.

Antony And The Johnsons puede gustar más o menos y hasta es posible que debamos requerir un especial estado de ánimo para disfrutar más de su música. Podemos incluso alegar que trabaja siempre los mismos recursos para construir sus canciones o que a, a veces, pudiera parecer repetir una misma escena tomada desde otro ángulo distinto.

Pero nadie puede negar, como decíamos al principio de esta reseña, que se trata de uno de los artistas más especiales que existen, actualmente sin rival ni parangón alguno.

sábado, 14 de marzo de 2009

Trembling Blue Stars - Last Holy Writer

Nos gustan los artistas valientes, aquellos que no se ciñen al manual, que no son artistas de libro, los que son capaces de crear atmósferas en las que, cuando te sumerges y te dejas llevar, te pierdes en ellas por un buen rato. Nos gustan las obras en las que cada canción no es previsible a priori y requiere una escucha atenta para tratar de imaginar lo que el artista nos quiere transmitir.

Bobby Wratten, líder de Trembling Blue Stars, es uno de ellos. Nos encantó aquel maravilloso The Seven Autumn Flowers (2004) y volvimos a quedar prendados con el siguiente disco, su más reciente trabajo The Last Holy Writer (2007). Va a ser cuestión de investigar su discografía entera…

Los pasajes de su música son excelentes desde el punto de vista de la creatividad y de la composición musical. Su producción muy cuidada, muy delicada, con arreglos y efectos electrónicos, pero en su justa medida.

El disco pasa por pasajes de una latente oscuridad, para en otros dejar espacio al optimismo y a la luz. Piezas a veces desoladas, a veces evocadoras; pasajes melancólicos, intimistas; otras veces simplemente preciosos, rozando la perfección. Hay electrónica, si, pero hay también excelentes arreglos de guitarras (acústicas y eléctricas), espléndidas líneas de bajo, órganos, partes instrumentales, arreglos de cuerda, coros…

Perfectos ingredientes cuando además se saben cocinar con la maestría de Bobby Wratten, que deja planear su sugerente voz sobre ellos, relevado en algunos por la dulce voz de Beth Arzy, lo que le da aún más sensación de cohesión de grupo al disco.

http://www.myspace.com/tremblingbluestars


martes, 10 de marzo de 2009

Deerhunter - Microcastle


Deerhunter nacen en el año 2001, fundados por Bradford Cox y Moses Archuleta. Son originarios de Atlanta y es una banda que hace una música muy interesante, con un estilo que se mueve entre el shoegazing (esa música con un barniz de guitarras de trasfondo), el post-punk , el post-rock, la psicodelia, lo experimental y un poco en ese ambiente que llaman Noise. Etiquetas siempre subjetivas y frías, pero que hemos de comentar a título orientativo para que sepamos un poco de que estamos hablando.

Pareciera, pues, un poco lejos de la onda habitual de EL BOSQUE, pero no es así. POP -y de ahí su magia- es un amplio concepto que permite la confluencia de una gran variedad de músicas o estilos en torno a él. Corresponde al artista el hacerlos o no creíbles juntos.

Brad Cox, cantante, guitarrista y alma de Deerhunter, a buen seguro ha escuchado mucho a artistas como Sonic Youth, Pavement o Syd Barret.

Microcastle (2008) constituye el tercer disco del grupo y en él parece que han cuajado los esfuerzos experimentales desarrollados a lo largo de su trayectoria. Yo veo aquí simplemente grandes canciones; menos arduo, menos nieblas sónicas, más accesible y mucho más luminoso que experiencias anteriores. Definitivamente se nota ese menos jugar con el sonido –sin dejar de hacerlo- y una mayor decisión a la hora de hacer temas enormes como son los que se facturan en este disco.

Si alguien tiene dudas, que se apreste a oír la maravillosa Agoraphobia. Que maravilla de canción, que perfección y refleja mucho el espíritu de este disco.

Microcastle es para mí un muy buen disco, uno de los mejores del pasado año 2008, y muy audible cuando nos encontramos con el estado de ánimo oportuno. En fin, todo un descubrimiento positivo y, como todos ellos, lo traemos aquí para compartirlo con vosotros.

http://www.myspace.com/deerhunter


jueves, 12 de febrero de 2009

Dibujos animados

En esta ocasión, os traemos un regalo tanto para el oído como para la vista. Porque si los vídeos están muy logrados, las canciones son también muy bellas. Hemos seleccionado -con cariño- tres vídeos musicales basados en dibujos animados.

Esperamos que os gusten y que os acompañen…


Sara Lov – New York



Dustin O'Halloran - Opus 23



Concretes - Warm Night.



Patty Griffin- Rain

lunes, 19 de enero de 2009

The WhitSundays

Sin abandonar la onda psicodélica, os queremos presentar a los canadienses The WhitSundays con su homónimo disco de debut. Un más que aceptable disco que salió a primeros del pasado año 2008 y quizá por ello ha sido olvidado en las listas de lo mejor del pasado año.

Nos presentan temas de pop barroco, psicodelia, garage y toques de power pop. Bellos pasajes con coros, voces perfectamente sincronizadas, guitarras y órganos vintage se dan cita en los parajes de su música. La envoltura es un guiño claro a ese pop de finales de los 60's, directamente sonado a Zombies, Syd Barret, Animals, Beach Boys, Kinks, Beatles, etc. Ahí es nada, con la sola mención de todos estos nombres juntos algunos ya nos habríamos caído de la silla o perdido la cabeza como el señor de la portada del disco...

Avalado por esas referencias, estamos decididamente ante un gran disco. Canciones bien construidas y políticamente correctas dentro de su estilo, pero en mi opinión puede que le falte algo de chispa, algo de pegada, algo que lleve a la adicción. Quizá es que sea demasiado fiel a sus reminiscencias, pero no deja de ser una apreciación subjetiva, porque el disco nos parece tremendamente bueno y es por ello que lo traemos aquí.

http://www.myspace.com/thewhitsundays




Sorry James

Y si te gustan The WithSundays, no dejes de escuchar a The Heavy Blinkers, otra banda muy en esa misma línea. Su disco The Night and I Are Still So Young (2004) es también una auténtica joya en el género.

martes, 13 de enero de 2009

Helio Sequence - Keep Your Eyes Ahead

Tras unos días de vacaciones, iniciamos este 2009 con fuerzas renovadas y con intenciones de seguir descubriendo, seleccionando, escudriñando y desempolvando ese pop de calidad que tanto nos gusta aquí.

Y tenemos un montón de propuestas nuevas por presentar y también un gran número de tesoros ocultos por descubrir aquí en EL BOSQUE, así que no dejes de visitarnos de vez en cuando.

Vamos a empezar el año presentando a un grupo formado por dos personas: se hacen llamar The Helio Sequence y su último disco Keep Your Eyes Ahead (2008) es una verdadera joya y uno de los mejores trabajos aparecidos en el pasado año.

Se trata de un dúo que nació hace ya casi diez años compuesto por Brandon Summers (vocals, guitars) y Benjamin Weikel (keyboards, drums). Atrás quedaron los tiempos en que para llevar adelante magnos proyectos se necesitaba un grupo con numerosos de integrantes. Estamos en tiempos en los que la tecnología se ha puesto al servicio del ingenio –no únicamente del buen sonido y la producción- y, si hay chispa y algo que transmitir, ya es suficiente.

Helio Sequence, pues. Algo tan sencillo y, sin embargo, la causa de la vida. La secuencia de la fusión del hidrógeno en helio; eso es lo que ocurre en el Sol, desprendiendo la energía que ha hecho y hace posible nuestra existencia.

Los hemos descubierto cuando ya llevan 4 discos en el mercado, aunque justo a tiempo cuando parecen haber alcanzado su madurez. Han acortado sus temas; ahora son más directos y más sencillos, sin dejar sus peculiaridades experimentales como es el uso de voces pregrabadas en dormitorios e incluso una guitarra cuyo sonido fue grabado dentro de un armario.

En su música hay rock psicodélico, dream pop, temas acústicos, algunos ritmos electrónicos y ambientaciones cercanas al noise-pop.

A nosotros nos parece un más que notable disco, una excelente propuesta en fin… y por ello queremos compartirla con todos vosotros.

http://www.theheliosequence.com/
http://www.myspace.com/theheliosequence

miércoles, 17 de diciembre de 2008

I Am Kloot - Play Moolah Rouge

I Am Kloot se funda en 1999 en Manchester en el club Night&Day. John Bramwell trabajaba allí como organizador de conciertos y en este lugar conoció a los otros dos miembros del grupo: Andy Hargreaves y Pete Jobson.

Su música tiene una gran personalidad y un estilo muy definido, de forma que si buscas en el baúl de las reminiscencias, ves que no suena de forma muy similar a nadie en concreto; más bien al contrario, tiene una voz y un estilo tan peculiar que podríamos llegar a utilizar en alguna ocasión el “esto suena a I am Kloot”.

I am Kloot es una de esas joyas que uno guarda como oro en paño y por la que tiene cierta debilidad desde hace muchos años. Es uno de esos “tesoros ocultos” que ha llegado la hora de desempolvar aquí en EL BOSQUE.

Yo veo a Bramwell como uno de los mejores escritores e intérpretes de canciones de esta década, modestamente camuflado bajo el telón que proporciona el nombre de una banda llamada I am Kloot.

Tiene el talento y carisma necesario para no parecer pesado o monótono, a pasar de su marcado estilo personal, y tiene la magia necesaria para no ser un cantautor al uso, que quizá a muchos pudiera aburrir. En un disco de I am Kloot hay excelentes canciones siempre, pero es que te encuentras con 3 ó 4 obras de arte compositivas que enseguida te das cuenta que están al alcance de muy pocos: no sabemos cómo tanta sencillez puede desgranar tanta pasión. Y no, tampoco son baladas al uso. Realmente, no sabemos lo que es… es I Am Kloot.

Su primer album Natural History apareció 2001, y el segundo homónimo I Am Kloot dos años después. Vaya señor discazo que es este último. Después vino Gods and Monsters (2005) y ahora nos han vuelto a dar de lleno en el corazón con Play Moolah Rouge (2008). No hace mucho que lo estoy oyendo, pero engancha cada vez más en cada escucha. Deseo que llegue el momento de poderlo volver a escuchar y lo único que lamento es que sólo tenga 10 canciones, como los discos de antes.

Aunque acabo de entrar en contacto con él, es lo suficiente para tenerlo entre los 5 mejores discos de este año 2008 que ya comienza su despedida.

He visto por ahí una definición de este disco Play Moolah Rouge, que yo extendería al resto de su discografía. La hace Mycroft_Barret en Rate Your Music y no me resisto a transcribirla aquí, porque por más vueltas que le diera, no me veo capaz de definirlo mejor:

"Discazo, emoción a flor de piel, lirismo, romanticismo épico, un torbellino de dolientes quejidos, de armas afiladas que se clavan contra el alma de uno, contradicciones del corazón, fuerza hecha carne, carne hecha fuerza, desvaríos y otro tipo de canciones más o menos afectadas".

No se puede decir más con menos.

Pero, ¿a qué suenan realmente estos I Am Kloot?

Suenan a… I Am Kloot.

http://www.iamkloot.com/
http://www.myspace.com/iamklootmusic

jueves, 27 de noviembre de 2008

Elbow - The Seldom Seen Kid

Volvemos a la actualidad y lo vamos a hacer con el que puede ser el mejor disco de este año 2008. Se trata de The Seldom Seen Kid del grupo Elbow.

Llegan procedentes de Manchester con un sonido siempre innovador -inevitables reminiscencias aparte- que se ha ganado la admiración tanto de la crítica especializada como la de otros artistas de renombre como REM, U2, John Cale o Blur, entre otros.

El quinteto se conoció en el colegio y empezaron a hacer música bajo el nombre de Mr. Soft, para más tarde pasar a llamarse Elbow. Hicieron 3 EP's de gran éxito y poco después debutaron en el mercado discográfico de la mano de V2 con su álbum Asleep In The Back (2001). ¡Qué gran disco! No os lo perdáis, si tenéis oportunidad de conseguirlo.

Más tarde editaron su segundo y tercer álbum Cast of Thousands (2003) y Leaders Of The Free World (2005) y ahora en 2008 nos han presentado su último trabajo The Seldom Seen Kid, que está llamado a figurar entre los mejores del año y no podíamos dejar de presentar aquí en EL BOSQUE.

La música que realiza Elbow está definida como Dream pop, aunque las etiquetas en si mismas son algo injustas, y más en el caso de una música con tantos matices como esta. Lo mejor que podemos hacer es hacernos con su último disco The Seldom Seen Kid y disponernos a degustarlo y desgranarlo pieza por pieza. Además, el arte de la portada y el libreto que incluye el disco son muy buenos y acompañan mucho en dicha tarea. Os aseguramos que no os va a defraudar.

La base de la música de Elbow es una atmósfera rock, pero muy apoyada en elementos orquestales y con una muy cuidada producción, muy al detalle. A menudo aparecen voces suaves o susurrantes, guitarras con ecos, coros y sonidos de sintetizadores, sin abusar y en su justa medida. Muy buena la instrumentación en general. La música que realizan es difícil de explicar y se nos hace arduo definirla. Sólo podemos añadir que es un grupo que suena de maravilla. Los altavoces del equipo HI-FI casi no pueden digerir tan rico, lleno y rebosante sonido. Su música tiene muchos recursos, mucha solidez; suenan con clase y a clásico. Elbow es la antítesis de lo mediocre.

Mucho me recuerda la voz del cantante Guy Garvey a la de Peter Gabriel y la música que hacen en muchos pasajes (y quizá incoscientemente por ende) a aquellos maravillosos primeros discos de Génesis. También hay algo de reminiscencias a Radiohead, con quienes disputaron (y ganaron) el premio Mercury Music Prize, que se otorga al mejor disco británico o irlandés del año.

lunes, 17 de noviembre de 2008

Descubriendo a The Ladybug Transistor

Hace ya algunos años escuchaba el disco The Albermale Sound y descubría así a The Ladybug Transistor, nuestros visitantes de hoy en EL BOSQUE. Recuerdo que, mientras escuchaba la canción Today Knows, lo primero que se me vino a la cabeza fue: “Qué maravilla…¿Cómo he podido vivir yo si conocer esto antes?”. Y hasta la portada del disco me parecía preciosa y en esa línea de arte pop que tanto nos gusta por aquí…

En mi mente se agolpaban las mayores exquisiteces de aquél pop psicodélico de finales de los 60, pero con un sonido más actual y una voz, la de Gary Olson, adictiva, hipnotizante y que brillaba con luz propia por encima de toda aquella hermosa instrumentación. Quizá, junto a John Grant de The Czars (otros que habrán de visitar este espacio), sean mis voces masculinas actuales preferidas.

La historia de The Ladybug Transistor comienza en Brooklyn (Nueva York), a mediados de los noventa. Empiezan con Marlborough Farms (1995), que se tituló como la ya legendaria casa victoriana que es cuartel y estudio de la banda. Fue un proyecto en torno a Gary Olson en colaboración con algunos amigos.

Fichan después por el prestigioso sello Merge Records (Arcade Fire, Magnetic Fields, East River Pipe, Dinosaur Jr.,...), el cual publica su siguiente álbum: Beberley Atonale (1997), un gran disco de aires puramente psicodélicos, muy sólido y con mucha pegada. La cosa marcha, va a más y fue entonces cuando The Ladybug Transistor se convirtieron en una verdadera banda -casi en una pequeña orquesta- con los hermanos Jennifer y Jeff Baron, Sasha Bell, San Fadyl y Julia Rydholm, eran ya un sexteto y lo mejor estaba por llegar. Nos dejan entonces joyas como el mencionado The Albermale Sound (1999), Argyle Heir (2001) y el homónimo The Ladybug Transistor (2003), discos en los que fueron desarrollando y consolidando su particular estilo. Varios de los músicos integrantes de la banda se alternaban en las tareas de composición e interpretación. Cada vez sonaban mejor…

El pop con originales raíces psicodélicas, más oscuro, y con más “toques guitarreros” de sus comienzos, se iba aclarando y evolucionaba hacia sonidos cada vez más preciosistas, con gusto por lo instrumental, con ligeros arreglos jazzies, con coros, teclados, vientos y cuerdas. Atmósferas instrumentales sobre las que flota la voz de Gary Olson con aplomo, mientras un manto de guitarras hace el resto.

Crecidos los componentes de la banda, varios de ellos trabajan a la vez en proyectos paralelos: The Essex Green (que tienen tres preciosos discos de pop-folk), The Sixth Great Lake (de corte más country-folk de raíces) e incluso Sasha Bell hacía su propio proyecto personal bajo el nombre de Finishing School. Quizá por todo ello, en su penúltimo disco The Laduybug Trasnistor (2003) se denota un sonido algo diferente, más directo y homogéneo, una vuelta a la las guitarras sin descuidar los arreglos instrumentales; se perfila, en fin, una nueva etapa más claramente bajo la batuta de Gary Olson.
En 2007, precedido del magnífico EP Here Comes The Rain, llega el que hasta ahora es el último disco de la banda, Can't Wait Another Day, que viene a afianzar aún más el sonido del anterior disco y en él The Ladybug Transistor avanza unos pasos más allá en la búsqueda del pop perfecto.

Vídeo: Always On The Telephone


viernes, 7 de noviembre de 2008

Concierto: Martha Wainwright


EL BOSQUE ha estado en el concierto que ha ofrecido Martha Wainwright el 7 de Noviembre en la sala Joy Slava de Madrid.

Os contamos nuestras impresiones del concierto...

Eran poco más de las 10 de la noche y salía Martha al escenario con una de sus varias guitarras acústicas. Y lo hacía sola, en silencio, sin sus músicos, que quedaban esperando en la trastienda… Empezaron a vislumbrase las primeras notas de I Wish I Were, el tema que cierra su último disco. Era una versión de corte acústico, sin más instrumentos que su guitarra y su peculiar, versátil -y quizá poco ortodoxa- forma de desgranar las frases, con una voz llena de carácter, llena de matices, capaz de alcanzar un amplio espectro de registros. Era Martha, en todo su esplendor y con todas sus armas. El esperado momento no había hecho sino empezar…

Hizo varios temas –como This Life, impresionante- de esta guisa, con su voz y su acústica, pero las canciones no desmerecían en absoluto a las versiones de estudio con todos los arreglos instrumentales. Sólo así llena una barbaridad el espacio circundante. Se nota que esos temas han nacido así, desnudos, emanando de esas cuerdas, de esas manos, de esa voz y de ese tremendo talento.

El resto de músicos se incorporó al escenario y Martha fue haciendo un repaso por todas las canciones que conforman su último disco I Know You're Married But I've Got Feelings To, incluído el See Emily Play, homenaje a Syd Barret (Pink Floyd).

La interpretación fue magistral, así como el sonido y pudimos disfrutar de un concierto genial en todos sus aspectos, a pesar de ser una puesta de escena de corte sencillo. Se nos hicieron muy cortas las casi dos horas que estuvo en el escenario y es que la calidad y ese toque de chispa de todos y cada uno de sus temas es increíble.

Martha Wainwright tiene un gran talento no solo interpretatitivo, sino también a la hora de componer y las canciones son auténticos monumentos arquitectónicos. Flirtea sin paliativos por el folk, pop, country, rock, blues o soul… y todo sonando realmente cohesivo, coherente y convincente.

Y tras el fastuoso Factoy, finalizaba el concierto de forma algo inopinada con Dis, Quand reviendras-tu?, que es una tema de esos bonus-rareza de la edición especial de su primer disco, con una base de piano y cantado en francés y que nos puso a todos los pelos "como escarpias". Pero todo tiene un final y este espectáculo lo encontró aquí...

En definitiva, un concierto sencillo, pero apasionante, emocionante y muy bien ejecutado. Ganas nos dieron de volar hacia Barcelona, donde al día siguiente volvía a tocar en la sala Bikini...

Fotos


Fotos tomadas por nosostros en la actuación en la Joy Slava de Madrid

Vídeos


When The Day Is Short



In The Middle Of the Night



This Life

(Los vídeos anteriores corresponden a la actuación en Glasgow)

Y para finalizar...

Black Cab Sessions. Chapter Fifty-one.
(Documento: Martha canta en la parte trasera de un Taxi)


Últimas noticias en la web oficial:
(¡¡¡Hay mucho material!!!)

Diario de Martha sobre el Tour que está realizando: